Aprendizaje del Conocimiento Técnico vs Conocimiento de Competencias

El aprendizaje es el proceso de adquirir nuevos entendimientos, conocimientos, comportamientos, habilidades, valores, actitudes y preferencias. Asimismo, es posible categorizar el aprendizaje como formal, no formal e informal. El primero hace referencia al que se lleva a cabo dentro de un proceso institucionalizado, reglado y pautado. Sucede en escuelas, institutos o universidades; responde a unos objetivos didácticos, con una duración específica, y que concluye con una evaluación y certificación. El segundo vendría a ser el aprendizaje estructurado, pero no académico. Se da en cursos especializados no académicos presenciales o virtuales, en talleres de formación, en cursos in-house dentro de las empresas, etc. Por último, el aprendizaje informal vendría a ser todo aquel aprendizaje no estructurado, sin objetivos didácticos ni duración definida, que es obtenido en actividades cotidianas relacionadas con el trabajo y el ocio.

El aprendizaje del conocimiento técnico

El conocimiento técnico (también conocido como habilidades técnicas, hard skills o know how) son conocimientos específicos del trabajo, relevantes para cada puesto y nivel de liderazgo. En otras palabras, cada puesto en cada empresa requerirá una lista única de conocimientos técnicos. Por ejemplo, un redactor web deberá tener conocimientos de redacción y SEO (optimización en motores de búsqueda), así como un diseñador gráfico requerirá conocimientos en herramientas gráficas como Photoshop, Illustrator e Indesign; o un líder de proyectos de innovación requerirá conocimientos en project management y procesos de innovación. Todos estos conocimientos técnicos permiten a las personas efectuar sus funciones correctamente y pueden ser conocimientos en usos de herramientas, equipos o maquinarias; o en aplicación de técnicas, metodologías o protocolos. Los conocimientos técnicos pueden ir desde el uso correcto de maquinaria industrial hasta técnicas de gestión de equipos humanos. El conocimiento técnico usualmente es obtenido mediante aprendizaje formal o no formal. Es decir, aprendizaje estructurado académico o estructurado pero no académico. Se obtiene en universidades, escuelas de post-grados, cursos de formación especializados no académicos, cursos in-house que se den dentro de las empresas, talleres de formación, etc.; y se pulen aplicando los conocimientos aprendidos y ampliando dicho conocimiento mediante el autoaprendizaje con los recursos que se dispongan.

El aprendizaje de las competencias

Las competencias (también conocidas como habilidades blandas o soft skills), por otro lado, son agrupaciones de comportamientos que permiten a los colaboradores tener un mayor nivel de desempeño dentro de la organización, cuando se dan en la persona. Están asociados a la personalidad, la inteligencia emocional y las experiencias laborales o personales que el colaborador haya tenido. Las competencias pueden ser categorizadas cómo genéricas, cuando son aplicables a toda la organización y suelen formar parte del modelo de competencias organizacional, funcionales cuando suelen ser aplicable a una cierta área, sub área u otra agrupación de puestos, o personales si se usan para medir solo a personas específicas como parte de algún proceso de desarrollo. Algunos ejemplos de competencias serían trabajo en equipo, proactividad, planificación, comunicación, orientación a resultados, etc. Las competencias suelen desarrollarse mediante el aprendizaje informal que ocurre en las experiencias laborales y no laborales del día a día; pero, también pueden desarrollarse bajo procesos de aprendizaje no formal cómo los programas de desarrollo habilidades blandas, el coaching ejecutivo y el mentoring.

Diferencias de los procesos de aprendizaje

El conocimiento técnico exige un mayor uso de la inteligencia racional para poder entender en mayor profundidad conceptos, memorizar métodos, y resolver problemas que se vayan dando como parte del aprendizaje formal o no formal. Está mucho más ligado a nuestra habilidad de procesar información de manera racional en ambientes de aprendizaje estructurados y también en la práctica.

Por otro lado, las competencias suelen desarrollarse como consecuencia de ciertas predisposiciones que una persona posea y los contextos a los que sea expuesta. Las predisposiciones vendrían a ser la personalidad y la inteligencia emocional de la persona, y los contextos serían diversos escenarios que exijan a la persona desplegar aquellos comportamientos necesarios para adaptarse correctamente a lo que la situación exija. Un ejemplo sería el de una persona que, gracias a su personalidad e inteligencia emocional, ya tiene una predisposición a comunicarse adecuadamente, pero además, al estar en ambientes altamente sociales en su vida personal y laboral, desarrolla con rapidez la competencia de comunicación. Si la persona tuviera la predisposición pero no fuera expuesta al contexto, no desarrollaría la competencia en el mismo grado del primer caso. Igualmente, si la persona fuera expuesta al contexto pero no tuviera la predisposición, tampoco se desarrollaría en el mismo grado.

Debido a estas diferencias en los procesos de aprendizaje, el aprendizaje de conocimiento técnico suele ser bastante más veloz que el de competencias. El primero exige el entendimiento de conceptos e ideas, mientras que el segundo exige un cambio comportamental, que suele requerir la reevaluación de paradigmas y la creación de nuevos hábitos en favor del nuevo comportamiento a adoptar.

Conclusión

Tanto los conocimientos técnicos como las competencias son necesarias para poder desempeñarse adecuadamente dentro de una organización. Habiendo dicho esto, algo que va sucediendo con las posiciones de las organizaciones, en medida que van siendo de mayor responsabilidad, liderazgo y jerarquía; es que exigen a colaboradores con un creciente nivel de habilidades blandas más que un vasto nivel de conocimientos técnicos, aunque también siguen siendo relevantes. Esto es debido a que las posiciones de mayor nivel tienen que ver más con la gestión de personas y habilidades de liderazgo, que están altamente ligados a competencias, que con el conocimiento específico de alguna herramienta o metodología, que de ser necesario, puede implantarse con mayor facilidad que lo que demoraría el desarrollo de competencias.