Muchas veces en el ambiente laboral los líderes pueden enfrentarse a momentos de presión. Lo más importante es cómo se reacciona a esas situaciones, especialmente cuando ellas suponen retos y son de alta prioridad en el trabajo. El autosabotaje puede tomar lugar en estos momentos y producir que no se actué de la manera adecuada para solucionar los problemas. Por ello, se debe identificar qué produce el autosabotaje para que el peor obstáculo no sea uno mismo.

¿Cuáles son esos momentos de presión?

• Situaciones de elevada presión o de incertidumbre
• Resultados inesperados o totalmente nuevos
• Retos que la persona perciba que sobrepasan sus recursos
• Momentos donde se le exige premura
• Actividades con un nivel de complejidad muy alto.

¿Qué puede producir el autosabotaje?

• Ansiedad
• Poca objetividad
• Reacciones impulsivas
• Miedo intenso
• Inseguridad
• Sensación de falta de control

Cómo evitar el autosabotaje:

• Identificar previamente las situaciones que lo llevan a un autosabotaje.
• Reconocer las emociones que le generan y las respuestas que usualmente da.
• Cuestionar las creencias limitantes que podrían estar interfiriendo en una respuesta adecuada y cambiarlas a ideas positivas y objetivas.
• Hacer una lista y progresivamente llevar a la práctica conductas adaptativas alineadas a las ideas positivas. 
• Tener claro las metas propias que nos motivan.
• Consolidar la autoconfianza en sus propias capacidades.
• Cultivar la perseverancia en función al cumplimiento de metas.

¿Qué puede hacer la organización?

La organización no debe desligarse de estas situaciones, ya que es el principal actor en el entorno laboral que sería perjudicado en estos casos. Se debe tomar acciones para prevenir ello y preparar a tanto colaboradores y líderes para enfrentarse a situaciones de alta presión.  La organización puede realizar evaluaciones periódicas en donde se identifique las posibles ideas limitantes o descarriladores que posee cada uno de sus trabajadores, a fin de trabajar sobre los resultados objetivos que arrojan las pruebas psicométricas.